marzo 24, 2012

Muerte



Un día de estos voy a morir. Cuando suceda, inevitablemente te darás cuenta que estaba vivo, eso quizá signifique que seguiré vivo; caminando por las mismas calles, visitando los mismos bares, leyendo los mismos libros… haciendo exactamente lo mismo que hacia cuando estaba vivo y vivía, entonces no sabrás qué decir o cómo decirlo, verás mi yo muerto viviendo en el mundo. El problema o el asunto es que yo tampoco no sabré qué decir ni cómo decirlo, te miraré con mi ojo muerto, ojo de sombra, ojo que fue tocado por la visión del hades y que se deleito en las profundidades del seol igual que en las profundidades del “chac mool”. Ojo que no sabe distinguir pues, pero que, sin embargo, percatará que sigues viva. Viva tan viva como siempre. No podrá hacer otra cosa más que cerrarse y seguir muerto.

A mi muerte sabrás que sigo vivo, pero olvidas pronto.

1 comentario:

  1. ¡Isaac! Me sentí triste cuando leí esto :´( Y soy muy egoísta, pero no quiero que te mueras pronto. No vayas a morirte pronto, por favor. Muere cuando seas bien viejito, pero no aún... Te quiero amigo...

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